miércoles, 21 de abril de 2010

De nuevo en Tijuana después de haber ido a Tecate ayer a actuar, breve descanso y mañana para Los Angeles donde el viernes acaba esta mini gira. Para quien no se situe, ambas ciudades son fronterizas con Estados Unidos y pertenecen al estado mejicano de Baja California. Se respira el rollo imperialista en la frontera y los yankis son de lo más desagradable. Si no fuera por Darsy, nuestro contacto americano, que es maravillosa diría que los estadounidenses son literalmente retrasados mentales.
Este viaje de momento no me hace replantear la mala opinión que tenía de la cultura americana. Por ahora solo hemos estado un día y pasado dos veces la frontera. Esto último es lo realmente tocapelotas. Por si alguien no lo sabe, más que entres con bombas, a los americanos les importa más que salgas con su dinero. A partir de ahora los cubatas con Meca-Cola.
No sigo por si el Tío Sam lo lee.
En cuanto a Mexico, es todo extremado; colores, olores, sabores... La comida es un escándalo de rica, desde hoteles de primera hasta los puestos de tacos callejeros, algo picosa, eso sí, pero rica, rica. Un dato, ciudad costera más ciudad mejicana... tacos de marisco, una pasada. Aunque tambien pican.
No puedo colgar fotos de momento a ver si mañana.

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